martes, 12 de diciembre de 2006

TESTIMONIO DE VIAJE ( Nicaragua 2006)

VIAJE A NICARAGUA

…El avión empezaba a descender, y yo empezaba también a bajar de las nubes…
Las ruedas del avión chocaron con fuerza contra el suelo, y noté como de golpe mi cabeza se quedó en blanco. Mis pensamientos se esfumaron y no importaba lo que yo hubiera pensado del viaje…porque la realidad empezaba ahora. El chirrido de las ruedas me avisó de que ya podía empezar a crear mi experiencia real, y noté también la presión del frenado… fue como si algo me tirara para atrás y me dijera: Sara ¡alto! Aquí tendrás que hablar poco, y escuchar mucho. Aquí no vienes a cambiarlo todo en un mes y marcharte como si hubieras hecho una gran obra… Aquí vienes a comprender. Aquí vienes a aprehender.

Nos vinieron a buscar al aeropuerto, y todos estábamos expectantes. Subimos a las furgonetas y empezamos a observarlo todo…las calles, las casas, las personas…
Si tuviera que destacar algo sería la tranquilidad. No vivían contando los minutos, corriendo con prisas sin mirar al de al lado, sin lanzar esas miradas asesinas cuando alguien se cruza en tu camino o se choca contra tu brazo robándote dos preciosos segundos de tu tiempo…no, allí las cosas no eran así.

La convivencia era también muy distinta…allí aunque fuera a escala pequeña había conciencia de grupo. Cierto es que cada familia velaba por sus hijos y por sus familiares cercanos, pero no se miraba solo por el bienestar personal, sino también por el bienestar de todo el grupo:
“Los vicios son malos para toda la comunidad”
Sr. Cándido (Comunidad El Mamonal)
Todo esto sin mencionar lo bien que yo y todos mis compañeros nos llegamos a sentir en todo momento…

Entre otras muchas cosas pude percibir una cierta desesperanza. Más que desesperanza era una resignación a la situación en la que estaban. Cierto es que tenían muchas ganas de mejorar ( cosa obvia viendo su precaria situación ), pero se sentían impotentes y también algo frustrados. Nos recibían con gran ilusión y con ganas de recibir ayuda y mejorar, pero quizás algo que les haría falta es comprender que Dios no les “bendecirá” sin hacer ellos ningún tipo de esfuerzo…Ellos oraban, esperaban que Dios tocara con su varita mágica, y seguían esperando. Quizás deberían comprender que “en el nombre de Dios” han de ser ellos los que actúan, los que trabajan, los que se esfuerzan por que las cosas cambien, y sin duda la educación es algo imprescindible.

Supongo que esto es fácil decir desde aquí, porque allí hay escasos, escasísimos recursos…pero educarnos significa poder enfrentarnos al mundo, significa saber situarte en el mundo, saber donde estas y que posibilidades hay, significa conocer, tener herramientas y poder utilizarlas. Sin duda la educación transforma el mundo, y si digo que se necesita educación, no me refiero solo a Nicaragua, sino al mundo entero.

“Educar es liberar al hombre,
educar es trasformar el mundo”
(Escuela Los Quinchos)

TESTIMONIO DE VIAJE (Nicaragua 2005)

Ay Nicaragua, Nicaraguita!!

Me propuse escribir un diario de viaje, no lo consegui. Los dias alli eran tan intensos, tan cargados de sensaciones, sentimientos y vivencias, que era incapaz de resumir con boligrafo y papel lo que seguramente me costara tiempo de entender.

A Nicaragua llegué con la mente en blanco, aunque seria de necios negar que llevé conmigo un monton de ideas preconcebidas, de prejuicios y miedos que, a pesar de que odie esta expresion, el mundo occidental nos ha hecho creer.

Llegué dispuesta a aprender, a ver, a comprender y a cambiar. No con grandes pretensiones, ni tan siquiera con intentos de grandes azanas. No a cambiar vidas, ni situaciones. Tampoco en busca de algo concreto.
Cuando ahora me paro a pensar en lo que vivi, y me piden que escriba qué significo para mi, no encuentro imagen, palabra o frase que defina mis dias alli.

Si algo me llevo de Nicaragua es una gran experiencia. Y lo que seguramente formara parte de uno de los aprendizajes de mi vida. Aprendi a que hay otras formas de vivir y sentir. Vi con mis propios ojos el verdadero significado de las palabras union, compartir, fuerza y espiritu. Y senti en mis propios huesos la relatividad de la importancia de las cosas.

Antes de llegar, sabia que vivia en un mundo injusto, ahora sé que lo que existen son personas injustas.

De Nicaragua llegué con una maleta completamente vacia, pero con un corazon rebosante. No solo de un monton de vivencias, sino de historias. Lleno de personas que jamas olvidaré, porque sus vidas, su lucha y su entrega formaran siempre parte de mi ser.

Como dije antes, llegué como un papel en blanco. Y dia a dia fui escribiendo mi propia historia, en la que formaron parte muchas personas, y en la que todas ellas me aportaron mas de lo que jamas podria haber imaginado.

Tan solo me queda decir que siempre recordare Nicaragua como el pais que me abrio los ojos y me enseno un nuevo camino en el sendero de mi vida.

Y mientras escribo estas palabras un sentimiento de anoranza me recorre por la piel. Pero ese mismo sentimiento me dibuja una sonrisa en la cara cuando, desde la lejania, recuerdo aquellos dias donde la esperanza y la desesperacion se enfrentaban diariamente.

Ay, mi Nicaragua, Nicaraguita!.

TESTIMONIO DE VIAJE (El Salvador 2005)

VIAJE EL SALVADOR

Realmente se hace muy difícil condensar toda una experiencia en pocas palabras, pero si he de empezar por algo, me gustaría decir que realiza este viaje ha sido ver cumplido uno de mis sueños: el tener la oportunidad de conocer otro país, otra cultura, otra gente y compartir con ellos todo lo que soy. Considero que hay multitud de formas de viajar y comprender el por qué es ésta la que realmente te lleva al corazón de las personas y a comprender el por qué de tanta injusticia social.

Comienza mi viaje en un país maravilloso llamado El Salvador, un país geográficamente muy pequeño, pero con una gran historia y con un pueblo marcado por la lucha incansable y por la búsqueda de la justicia y de la igualdad. Son muchos los miedos te acechan: me adaptaré, seré capaz de adecuarme física y psíquicamente a los nuevos cambios… y un sin fin de etcéteras que son disipados cuando comienzas a convivir con unas personas que no has visto nunca, pero que en cuestión de segundos empiezan a formar parte de tu vida.
Estuvimos en cuatro comunidades, todas diferentes entre ellas, pero con un eje en común, el espíritu de lucha y el no dejarse abatir por las dificultades. En el momento en el que comienzas a compartir con ellas, todos los miedos e incertidumbres desaparecen, todo se ve como más pequeño, una misma se percibe minúscula ante la grandeza de una gente que no tiene nada y lo da todo. En este punto es cuando comienzas a entender que no tiene sentido la idea de “ir a ayudar”, al menos en un viaje tan corto en el tiempo. Todo lo contrario, el significado es “ir y dejarse ayudar”: que nos ayuden a entender una realidad, la desigualdad que viven, a comprendernos a nosotros mismos y la realidad que vivimos en nuestro mundo.
De mi experiencia me quedo con la cultura y la historia de un pueblo marcado por el dolor y la guerra. Pero, fundamentalmente, me quedo con las personas que viven inmersas en esa historia, personas únicas y llenas de comprensión, lucha y fe por conseguir la dignidad y la justicia. No se puede explicar como son esas personas, hay que experimentarlo. No me olvidaré de todas las familias de la Comunidad de San Antonio Abad, que aún viviendo en condiciones límites, ponían a nuestro servicio y al de otras personas más necesitadas de la comunidad todo lo que poseían y tenían. Tampoco me olvido de Salvador y Paula, de la Comunidad de los Jardines de Colón, un matrimonio marcado por la guerra y la opresión; padecieron torturas, saqueamientos y fueron perseguidos hasta el final por el ejército salvadoreño. Y que decir de los niños y familias de la comunidad de los Naranjos. Niños que se hacían adultos a corta edad, pero que no perdían su entusiasmo y alegría. No me olvidaré de sus sonrisas, de sus pies descalzos y de todas las tardes que pasábamos en la escuela y jugábamos al fútbol. Experiencias como estas sólo se tienen después de muchos días viviendo juntos, compartiendo alegrías y dificultades…

La superación y el poder libertador de estas personas, me ha demostrado hasta que punto somos esclavos de necesidades y exigencias sin sentido. Encontré una realidad en la que las personas son mucho más importantes que las cosas y que me ha demostrado que el compartir enriquece todo lo que se hace.

No se hace este viaje para llevar la propia ayuda, se va con la voluntad de exponerse a una experiencia única, hecha de pensamientos, cultura y personas. Se regresa con muchas dudas y con algunas ideas para darle un sentido a todo lo vivido, para hacer que el viaje no sea un evento casual, sino una etapa importante en la propia vida.

TESTIMONI DE VIATGE (Nicaragua 2006)

VIATGE NICARAGUA

Tot i intentar imaginar-me com seria la meva estada a Nicaragua, per res va ser com m’esperava...
Tant bon punt vaig saber que ja tenia els bitllets vaig començar a fer-me a la idea que el viatge que més esperava estava cada vegada més a prop. Els nervis i els dubtes van començar a sorgir i perquè no dir-ho, també la por; però en cap moment em va passar pel cap fer-me enrera i sort en vaig tenir...
Sabia que és un país pobre, que està passant per una forta crisi però la meva primera setmana a la regió de Matagalpa em va crear un fort impacte, em va desanimar molt. Aquella la recordo com la setmana més dura de tot el viatge.
Poc a poc vaig intentar extreure el màxim del viatge per a poder entendre i conscienciar-me de la situació del país.
Els dies anaven passant i la meva tornada era cada vegada més propera, per una part volia tornar per estar amb totes aquelles persones a les que havia trobat a faltar; però per l’altra ja començava a anyorar a les grans persones que deixava en aquell indret, que m’havia enamorat.
Tot i la trista situació en la que és troba la zona; aquella gent, aquells paisatges i la resta de coses que construeixen aquell entorn han fet que es despertés en mi una gran curiosaitat per Nicaragua, i altres països veïns. Per la qual cosa, m’he promés a mi mateixa que tornaré.
L’arribada a la nostra realitat va ser més dura del que em pensava. Per sort no vaig patir el famós “jet-lag”, però vaig estar alguns dies més que desorientada... qualsevol cosa em recordava la meva estada a Nicaragua, i en molts casos desitjava tornar a estar allà.
Per últim he de dir que el grup amb qui vaig realitzat aquest viatge em van servir de gran ajuda en els moments de desànim, a més d’haver compartit unes estones inolvidebles; durant el mes de convivència vam ser una gran familia!!

Bàrbara

viernes, 8 de diciembre de 2006

Triptico 2006

SIN DUDA HAS OÍDO
HABLAR DE LOS
“PAÍSES DEL SUR”...

Sin duda has oído hablar de los “países empobrecidos”. Lo has visto “de lejos” en alguna charla y sobre todo, a través de la TV, Internet..., pero la realidad es mucho más dura y rica a la vez. Una cosa es oírlo y verlo desde lejos y otra muy diferente es experimentar en tu propia vida todo eso que supone compartir con realismo el día a día de la gente, con las comunidades cristianas. Aquí en el “Norte”, a pesar de la crisis económica, normalmente tenemos mucho más de lo que necesitamos para vivir. Allí no tienen ni lo más necesario para comer, vestirse, velar por su salud... ¿Por qué?

¿LO QUIERES VER
REALMENTE DE CERCA?


¿Quieres conocer la profunda esperanza, a pesar de la inmensa pobreza, de los hombres y mujeres de los países empobrecidos?
Te invitamos a venir con nosotros y a aprender, durante un mes, los valores del compartir, tan olvidados por nuestra sociedad individualista y competitiva.
Te ofrecemos la posibilidad de aprovechar tus vacaciones de una manera diferente de como lo has hecho hasta ahora. No te ofrecemos ningún viaje de turismo (si es lo que quieres, ves a cualquier oficina de viajes). Nosotros te ofrecemos una experiencia de vida solidaria con los empobrecidos de la tierra.


VIAJES, ¿A DÓNDE ?

A.- NICARAGUA
Estancia con familias de las comunidades de base de la periferia de la capital. Después, visitas y estancias en las zonas rurales:
- Tola, sur del país.
- Matagalpa-San Ramón, centro norte.
- Masachepe-Arenal, cooperativa agrícola

B.- EL SALVADOR
Unos días en la capital en la parroquia suburbana de S. Antonio Abad o en el albergue de las comunidades cristianas. Después, estancias o visitas entre tres opciones:
- Morazán, este del país
- Chalatenango-Guarjila, norte
- Zona suburbana de la capital
- Otras...

C.- GUATEMALA
Unos días en un albergue de la capital y de la periferia. Después, en pequeños grupos, en diferentes comunidades de retornados o indígenas.

NOTA: no hay un programa de viaje estricto, puesto que puede variar dependiendo de las circunstancias de las comunidades que nos acogen cada verano.